Conozco a pocos promotores inmobiliarios que, tras terminar una obra, encarguen a un buen fotógrafo un reportaje en condiciones.

Creo que es un error grave no hacerlo. Pierden una oportunidad de oro para transmitir confianza a los clientes de las siguientes promociones que empiecen.

Pueden enseñar en persona y online lo que has hecho bien en el pasado.

 

Nosotros somos los “fotógrafos de lo inexistente”.

 

Mediante el ordenador somos capaces de reproducir, cada día un poco mejor, cómo serán esas viviendas cuando se acaben.

En este caso, el promotor tiene menos dudas. Entiende que, con nuestra ayuda, tendrá una herramienta de venta crucial para acelerar las ventas.

En el pasado, las maquetas físicas y las perspectivas pintadas a la acuarela tenían esa función.

 

¿Haces fotos de lo real y lo inexistente?

Con lo segundo .

 

Por eso…

 

HACEMOS FELICES A LOS PROMOTORES