Mi mujer no para de repetirme que tengo el síndrome de Diógenes.
Nunca se lo reconoceré…pero tiene razón.

Desde que me monté el estudio en casa y mis padres murieron, he tenido una época en la que entraban en casa más cosas de las que salían y, claro, ya casi no cabemos.

Para eso Wallapop, es una buena herramienta. Reconozco que me he deshecho de muchas cosas.

Lo que no me gusta nada es el proceso.

En ocasiones, cuando me han pedido una rebaja en algo que estaba relajado, he subido el precio.

Me daba igual no venderlo. No me daba la gana de pasar por ese aro.
Mis discusiones me ha costado con mi mujer.

Pero para comprar me pasa parecido. No entiendo el poco esfuerzo que hace la gente para vender y cuánto empeño ponen a la hora de comprar con rebaja.

Sólo hablan de características y no hablan de BENEFICIOS.

Si a mí, o a cualquiera, nos dicen que con esa máquina cortaremos el césped en 10 minutos la compraríamos mucho antes que si nos quieren vender una cortadora Bosch de x potencia en buen estado.

Pues eso.

Exactamente lo mismo pasa si quieres vender tus pisos (creo que aún no se venden por Wallapop) pero a menudo parecen anuncios de esta plataforma.

Tu cliente busca BENEFICIOS y no CARACTERÍSTICAS.

Si lo haces bien, te quedarás sin pisos en el trastero.

Sabemos cómo enseñar tu promoción para que consigas venderla por precio más alto posible.

Llámame y te digo cómo hacerlo pero no te bajaré mis honorarios. Odio el “Wallapop Style”